Cuentan que hubo un castillo
con un jardín de rosas negras
tan negras como la muerte en si,
en ellas habitaba una princesa
que nunca lo quiso ser
ella quería tristeza
en un negro anochecer
cortaba una rosa diario
en su bello jardín de edén
las rosas eran tan negras, como su oscuro placer
su padre quería casarla
pero ella nunca quiso entender
amaba la noche fresca
y odiaba el amanecer.
Un mal día de sol,
su padre!
un cuerpo bello a ella quiso ofrecer,
pero ella nunca lo aceptaria
aunque en el fondo sabia,
que su padre la obligaría,
corriendo bajo al jardín
y corto todas sus rosas
una por una cayó
hasta que todo el jardín seco
sus manos estaban sangrando
pero eso no le importó,
tomo la ultima rosa
y así al bosque huyo
metiéndose a una cueva
donde nadie jamas la hallo...
Dicen y cuentan
que en la cueva se encerró
poniendo la rosa en su pecho
ella sola se suicido
años mas tarde
en una cueva escondida
un jardín de rosas negras se hallo
con una mujer en el centro
y una rosa en su corazón
¡Pobre princesa mía!
nadie sabe lo que paso
nadie comprendió la tristeza
que habitaba en tu corazón
¡oh! pobre princesa mía
podare los rosales en tu lugar
para que tu memoria se quede
y nadie la pueda olvidar.
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